Muere el actor Bob Hoskins a los 71 años

Alcanzó la fama por su papel en la película de Disney «¿Quién engañó a Roger Rabbit?

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El actor Bob Hoskins (condado de Suffolk, sureste de Inglaterra, 1942) ha muerto a los 71 años de una neumonía, de acuerdo con su agente. 

El británico, conocido por sus papeles de gánsteres, también fue muy popular al dar vida al detective Eddie Valiant en el clásico de animación ¿Quién engañó a Roger Rabbit? de 1988. "Estamos desolados por la pérdida de nuestro querido Bob", han manifestado en un comunicado su mujer, Linda, y sus hijos, Alex, Sarah, Rosa y Jack.

Hoskins comenzó su carrera, —que se extendió por treinta años—, en los setenta en el teatro y la televisión, y empezó a despuntar en el cine con su encarnación del gánster Harold Shand junto con Helen Mirren en El largo Viernes Santo (1980) y en Mona Lisa (1986), un papel que le valió la nominación al Oscar como mejor actor. También brilló en la comedia o en el género de aventuras con Super Mario Bros (1993) o Hook (1991), en la que trabajó a las órdenes de Steven Spielberg. Otros de los títulos a lo largo de su carrera son Cotton Club (1984), Sirenas (1990), Nixon (1995) o Enemigo a las puertas (2001), en una combinación de grandes producciones de Hollywood con proyectos independientes.

El actor, hijo de una cocinera y maestra de guardería y de un camionero, dejó la escuela cuando tenía 15 años, pero ya con una fuerte pasión por la literatura y por la lengua que le había insuflado su profesor de Inglés. Su intención era lograr un espacio sobre las tablas de los teatros, pero durante un largo tiempo tuvo que ganarse la vida en diversos trabajos. Finalmente, su primera incursión como actor respondió a una casualidad, según relataba: había acompañado a un amigo a un casting, y se vio repentinamente leyendo las líneas empujado por uno de los organizadores. Se hizo con el papel.

Entre los galardones que obtuvo en su carrera destaca el Globo de Oro al Mejor Actor y el Premio BAFTA en la misma categoría, ambos reconocimientos por su papel en el filme Mona Lisa. Recibió asimismo el reconocimiento a toda su trayectoria en el Festival de San Sebastian de 2002, al ser distinguido con el Premio Donostia.

En agosto de 2012 Hoskins anunció su retirada de la actuación y reveló que padecía la enfermedad de Parkinson.