Israel levanta restricción en Explanada de las Mezquitas

Por primera vez en varios meses, Israel autorizó a miles de musulmanes, sin restricciones de ningún tipo, a orar en la Explanada de las Mezquitas en Jerusalén


Los fieles franquearon sin dificultad las puertas de la Explanada. Los hombres colmaron la mezquita de Al Aqsa y las mujeres el Domo de la Roca, observaron varios periodistas.

Miles de fieles que no pudieron entrar a las mezquitas, desplegaron los tapices para la oración en la explanada.

Hacía “cuatro meses que no podía orar el viernes en Al Aqsa, incluso durante el mes sagrado del Ramadán” , dijo Amir, de 18 años.

“Cada vez que lo intentaba había un policía druso o un árabe como yo, que me prohibía ir a rezar” , agregó.

Una palestina de unos 70 años dijo que en los últimos tiempos “le daba miedo venir” , mientras se tomaba una foto delante del Domo de la Roca para enviársela a sus hijos en Alemania.

“¡Al fin puedo rezar en Al Aqsa!”, exclamó la mujer.

La policía israelí seguía desplegada masivamente en las puertas y en la Ciudad Vieja, que domina la Explanada, pero se limitaba a controles esporádicos, en particular de los hombres más jóvenes.

“No hay límite de edad en el Monte del Templo, esperamos que hoy habrá calma y tranquilidad” , declaró el portavoz policial Micky Rosenfeld, utilizando el término judío para el sitio de la Ciudad Vieja donde se han registrado enfrentamientos desde hace varios meses.

Rosenfeld vinculó la decisión de eliminar las restricciones a la reunión del jueves en Jordania entre el secretario de Estado estadounidense John Kerry y el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu.

En esa reunión se asumieron “compromisos firmes”, según el jefe de la diplomacia norteamericana, para tratar de disminuir las tensiones en Jerusalén Este.

Kerry se entrevistó con el presidente palestino Mahmud Abas y luego con Netanyahu y el rey Abdala II de Jordania, que tiene a cargo la gestión de la Explanada.

Netanyahu reafirmó “su compromiso de mantener el statu quo”  de la Explanada y que autoriza la visita de los judíos pero sin derecho a rezar, indicó Kerry.

Las partes se comprometieron además a tomar “medidas constructivas, medidas reales, no retóricas”  para que las tensiones “no se transformen en un incendio imposible de controlar” , agregó sin dar detalles.

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